Disponible desde el 1 de abril en Steam y PlayStation 5, Koira es una aventura de corta duración que fusiona hermosos paisajes dibujados a mano, una banda sonora cautivadora y una historia de amistad profundamente emotiva. Desarrollado por Studio Tolima y publicado por DON’T NOD, el juego nos invita a acompañar a un pequeño cachorro en un viaje lleno de ternura y desafíos, mientras tratamos de protegerlo de los cazadores que lo persiguen a través de un misterioso bosque. La historia de Koira se desarrolla sin necesidad de palabras. A lo largo de la aventura, seremos testigos de una narrativa visual y sonora que explora el vínculo entre nosotros y el cachorro.
La ausencia de diálogos no impide que el juego nos conecte con sus protagonistas; al contrario, las emociones se transmiten a través de escenas cargadas de simbolismo y acompañadas por una música que eleva cada momento. Desde el inicio, el viaje comienza con un despertar en medio del bosque. Los ladridos de un cachorro nos alertan de su necesidad de ayuda. Decididos a liberarlo, nos embarcamos en una travesía para escapar de los cazadores que están al acecho. Nuestra meta es llegar a una pequeña casa cerca de un lago, pero los cazadores también nos siguen, lo que convierte la travesía en una carrera contra el tiempo. A lo largo de las tres horas que dura este pequeño viaje, Koira nos desafiará con diferentes actividades, acertijos musicales y momentos de juego con el cachorro, que van desde lanzarle palos hasta hacer muñecos de nieve. El juego tiene un enfoque lineal, pero no por eso carece de sorpresas. Mientras nos adentramos en el bosque, interactuamos con otros animales, como jabalíes, que nos ayudan a avanzar y a sortear los obstáculos.
Sin embargo, la amenaza de los cazadores nunca está lejos. Para evitar ser descubiertos, debemos movernos con sigilo, aprovechar el entorno a nuestro favor o, en ocasiones, dejar que la furia se apodere de nosotros para ahuyentar a nuestros perseguidores. Uno de los aspectos más destacados de Koira es su increíble diseño visual. El bosque, dibujado a mano, está lleno de detalles que crean una atmósfera mágica, con árboles y flores que brillan en una paleta de colores vibrantes. Cada nueva escena nos sorprende con su belleza, creando una experiencia visual que es, por sí sola, un deleite para los sentidos. Pero lo que realmente hace única a esta aventura es su banda sonora. Las composiciones musicales, cargadas de emoción, acompañan perfectamente cada paso del viaje, haciendo que cada momento, ya sea de calma o tensión, se sienta aún más intenso. Sin la música, Koira sería una experiencia completamente diferente.
En cuanto al estilo de juego, podemos disfrutar de una variedad de actividades simples pero satisfactorias: alimentar al cachorro con manzanas y zanahorias, jugar a escondidas o incluso hacer surf en un lago congelado. Estos momentos ligeros proporcionan un respiro emocional antes de enfrentar los peligros que nos acechan. Sin embargo, no todo es diversión: los cazadores nos obligan a ser astutos, a escondernos y a utilizar el entorno para desorientarlos. Cada encuentro con ellos es una prueba de ingenio y valentía.
